Una semana atrás recordamos la captura del camarada Gonzalo, el líder del grupo terrorista que sumergió a nuestro país en las décadas más oscuras de su historia. Veinticinco años han pasado desde 1992, veinticinco años después del autogolpe, veinticinco años sin Madre Coraje, veinticinco años, un profesor y nueve estudiantes desaparecidos.

Si hay algo que une a todos los peruanos es el fútbol la esperanza y el compromiso de nunca olvidar aquellas décadas de violencia y terror. Es por ese motivo que desde el 18 de agosto se exhibe en el LUM la carpeta colaborativa Resistencia Visual 1992, concebida y curada por Karen Bernedo. 36 artistas gráficos y colectivos nos presentan en conjunto sus obras independientes, las cuales tienen en común el año que marcó la historia peruana. Un recordatorio de cada esterilización, asesinato, secuestro, coche-bomba, marcha y captura que se produjeron, en un intento de sensibilizar a cada visitante y de mostrar uno de los distintos puntos de vista sobre lo que ocurrió.

rv 1992

Afiches de Resistencia Visual

Extraído de https://antifil.pe/resistencia-visual-un-testimonio-de-parte/

La polémica comenzó tres días después de la inauguración de la carpeta colaborativa, cuando se le pidió la renuncia al entonces director del LUM, el sociólogo Guillermo Nugent. ¿La razón? Inclinación y sensación general de sesgo provocada por la muestra. El ministro Del Solar  indicó que ésta abría la posibilidad de que el LUM pueda ser acusado de ser una institución parcializada, lo cual es, en su opinión, el peor daño que puede hacérsele. Para aclarar mejor el panorama, debo explicar que, en Resistencia Visual 1992 (RV 1992), se exhiben no sólo los delitos cometidos por Sendero Luminoso o las fuerzas armadas, sino también por los cuales el ex mandatario, Alberto Fujimori, se encuentra cumpliendo condena. Esta incluye a su vez algunos temas que se encuentran ausentes de la muestra permanente del LUM: el asesinato de Pedro Huilca Tecse, las privatizaciones, etc. La muestra ha sido colocada en el centro de la crítica, recibiendo el calificativo de anti-fujimorista, activista y “no apta” para el LUM.

Más allá de mis inclinaciones políticas, considero que es prácticamente imposible hacer un trabajo, en un contexto como el planteado, en el que no se muestre o infiera una inclinación. Así como también, es muy poco probable que no presente opiniones en contra, pues en temas tan complejos, llegar a un consenso nacional es una utopía. Personalmente, creo que todas las personas hacen política día tras día y como artista, creo que el arte no es ajeno a este fenómeno. ¿Por qué debería serlo? No estoy diciendo que todas las manifestaciones de arte deban o estén enfocadas en el activismo social o en una protesta política. Sin embargo, sé que este arte existe y que su función en la sociedad no es menos ni más importante que la del resto. El arte impacta y llega a las masas, nos sensibiliza y nos vuelve consciente del otro; con el arte se puede gestionar un cambio. Tanto para bien, como para mal.

Durante la década de los 80´s, Sendero Luminoso utilizó el arte como arma: difundieron su ideología a través de teatros, pinturas y diversos espectáculos artísticos. Este trabajo cultural tuvo como eje y objetivo principal los sectores populares. Cárceles, pueblos ignorados por el Estado, asentamientos humanos, etc. Muchos de los artistas que apoyaban a Sendero se llegaron a agrupar en el Movimiento de Artistas Populares (MAP). Sus integrantes no solo expandieron su ideología a la población, sino que también llevaron ésta a las condiciones del artista de la época. Ellos buscaban crear el Arte de Nuevo Tipo, el cual define uno de los senderistas presos como: “un arte que tiene un carácter de clase y se pone al servicio del pueblo, que su  contenido lleve un mensaje aleccionador y que guíe a las propuestas revolucionarias”

puño

Pintura realizada por condenados a terrorismo

Extraída de http://www.americatv.com.pe/noticias/actualidad/movafed-sendero-luminoso-daniel-urresti-pinturas-terrorismo-abimael-guzman-n164622

Las razones por las que Resistencia Visual 1992 y las expresiones artísticas del MAP fueron creadas son totalmente distintas. Sin embargo, no porque haya existido la segunda, se debería eliminar la primera. Celebro la decisión de no censurar RV 1992 y que actualmente pueda seguir en exhibición, pero estoy en desacuerdo con la postura que considera que no debió ni debería presentarse en el LUM. Desde su creación, el Lugar de la Memoria  asumió su “compromiso de mantener un enfoque plural, acogiendo la diversidad de voces y rostros que experimentaron la violencia; promoviendo la memoria e impulsando el diálogo permanente.” Como muestra temporal, la colección cumple con esto, siendo una de las tantas voces que experimentó la violencia y dando pie al debate. Principalmente, mantiene viva la memoria. Veinticinco años son pocos y todavía (?) no hemos olvidado lo que el terrorismo provocó en nuestro país. Sin embargo, el tiempo y la generación perdida se irá con ellos, y es importante que  nos hagamos cargo de que las siguientes generaciones sepan quién fue Abimael Guzmán, es importante que no se olviden de lo que sufrió el Perú. Y si un grupo de personas quieren utilizar el arte para que el terror no quede en el olvido, bienvenido sea.