Según la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar del INEI (2016) el 11.2% de los peruanos mayores de 15 años son fumadores continuos. Esto ocasiona que al año se registren aproximadamente 16 000 muertes relacionadas al consumo de tabaco, lo que le origina al Estado un gasto promedio de S/. 2,707′670,000.

No nos detendremos en intentar explicar el por qué las personas caen en este vicio, si no que en este artículo atacaremos directamente una falsa premisa de la que muchos fumadores se han agarrado para continuar él. “Solo fumo en reus y menos de una cajetilla” o “es solo un par de puchitos a la semana; eso no mata a nadie” son frases que se escuchan a diario y que lamentablemente son tan falsas como el amor de tu ex.

Todos conocemos a alguien así...

Todos conocemos a alguien así…

Este mes se publicó un estudio de la University College London que destruyó el mito de que fumar un cigarrillo al día no produce un riesgo grave de adquirir enfermedades respiratorias o cardiovasculares. En otras palabras, fumar menos no es la solución; si bien esto puede reducir las probabilidades de cáncer (pues fumar un paquete diario causa al año aproximadamente 97 mutaciones en cada célula de la laringe, 39 en las de la faringe, 23 en las de la cavidad oral, 18 en las de la vejiga y 6 en las del hígado), se demostró que el light smoking (el consumo de menos de 5 cigarrillos diarios) causa que exista un 74% más de probabilidades de contraer enfermedades coronarias en el caso de los hombres y un 119% en el de las mujeres comparados con no fumadores.

Los resultados no terminan allí. También se constató que los hombres que consumen un cigarrillo al día tienen aproximadamente un 53% de las probabilidades de contraer enfermedades coronarias con respecto a quienes fuman 20 al día, mientras que en las mujeres esta cifra se reduce un poco pero sigue siendo considerable. Además, las probabilidades de tener un derrame cerebral son de 64% para los hombres que fuman un cigarrillo al día y la mitad de esta para las mujeres cuando son comparados con quienes fuman 20 al día. Esto demuestra que ningún fumador, por más “fumador social” que sea, se encuentra exento a sufrir enfermedades a largo plazo. Se debe recordar también que los efectos nocivos del tabaquismo no se manifiestan inmediatamente. Los expertos afirman que generalmente el cáncer pulmonar producido por el tabaquismo ocurre entre los 10 y 15 años después del inicio del consumo de cigarrillos y que en más de ¾ de los casos clínicos este se detecta una vez que se encuentra en fase terminal.

Fácil decisión

Fácil decisión

Somos conscientes de que no es sencillo cortar definitivamente el consumo de cigarrillos por lo que mucha gente recurre a otros medios para obtener nicotina y el que está cobrando más fuerza y popularidad actualmente es el uso de e-cigarettes. En la comunidad científica hubo un gran revuelo por descubrir si es que estos eran verdaderamente una opción más saludable a los cigarrillos convencionales; muchos hablaban de que una ingesta de los líquidos a la larga podría ocasionar cáncer y también se referían a que la combustión de estos al momento de ser aspirados acarreaba los mismos riesgos pulmonares que el humo de los cigarrillos. Sin embargo, de acuerdo al Royal College of Physicians, el daño que pueda producir el uso de e-cigarettes es inferior al 5% que ocasionaría el consumo de cigarrillos y considera necesario promover el uso de estos con el fin de reducir la adicción en la población a fumar. Es necesario acotar también que descartan la idea de que los e-cigarettes puedan ser una puerta de acceso para que los jóvenes tomen el hábito de fumar cigarrillos pues, según un estudio demográfico que realizaron, las personas que los utilizaban en su mayoría deseaban dejar de fumar, y quienes nunca habían caído en el vicio de los cigarrilos y que expresaron su negativa a fumar estos considerando que a largo plazo el uso de estos dispositivos y de los líquidos resulta más barato que comprar cigarrillos para fumar en proporciones similares y que los efectos son mucho menos perjudiciales sin contar el sabor que les proporcionan los líquidos y el tafin.

Sobre todo el tafin

Sobre todo el tafin.

Frente a todo esto, solo queda aferrarse a la fuerza de voluntad propia para abandonar este vicio, la adicción a la nicotina puede ser contrarrestada con el uso de e-cigarettes y esto no solo beneficiara a cada persona que lo deje, sino también a quienes lo rodean pues se conoce que los daños producidos por ser un fumador pasivo también son altos. Tal y como dijo Ribeyro refiriéndose a su obra “Sólo para Fumadores”, no buscamos satanizar el tabaco, solo presentar datos científicos y una posible vía de salida para quienes deseen cambiar su vida o se hayan elegido dejar el cigarrillo como propósito de año nuevo.

"…El fuego es el único de los cuatro elementos empedoclianos que nos arredra, pues su cercanía o su contacto nos hace daño. El cigarrillo nos permite comunicarnos con el fuego sin ser consumidos por él. El fuego está en un extremo del cigarrillo y nosotros en el opuesto. Y la prueba de que este contacto es estrecho reside en que el cigarrillo arde, pero es nuestra boca la que expele el humo.”

“El fuego es el único de los cuatro elementos empedoclianos que nos arredra, pues su cercanía o su contacto nos hace daño. El cigarrillo nos permite comunicarnos con el fuego sin ser consumidos por él. El fuego está en un extremo del cigarrillo y nosotros en el opuesto. Y la prueba de que este contacto es estrecho reside en que el cigarrillo arde, pero es nuestra boca la que expele el humo.” -J.R.R