Basta con ver la evolución de la aprobación pública de los políticos en los últimos años para notar que este indicador puede cambiar abruptamente de un momento a otro (para bien o para mal), debido al  importante papel que desarrollan los medios de comunicación y los destructores detractores, quienes siempre están al acecho. Hace unos días, Ipsos publicó un sondeo de opinión donde revelaba el porcentaje de aprobación de diversos políticos y algunos proyectos específicos. Desde PPK hasta Castañeda, casi todas las personas que ejercen cargos públicos enfrentan una caída en su aprobación conforme van avanzando en su gestión. Sin embargo, el actual contexto que enfrenta el país los ubica en el ojo de la tormenta, pues ante situaciones que requieren reacciones correctas y eficientes, el pueblo espera que sus gobernantes tomen las mejores decisiones.

Sube sube PPK (?)

A mediados de setiembre, el presidente Pedro Pablo Kuczynski contaba con un 63% de aprobación, porcentaje que, ahora, seis meses después, se ha reducido a menos de la mitad. Diversos episodios han marcado el gobierno del presidente en estos últimos meses, siendo su tensa relación con la oposición fujimorista uno de los puntos más importantes en el desarrollo de su agenda. Esta se ha visto reflejada en la censura del ex ministro de educación, Jaime Saavedra, y en la suspendida interpelación al ministro de transportes y telecomunicaciones, Martín Vizcarra. Para el presente mes, la aprobación presidencial ha registrado un aumento de 2 puntos porcentuales respecto a febrero en el marco de los desastres naturales y la reacción del gobierno ante ello, lo que le ha puesto fin a una continua caída que la sitúa en 31%.

Junto con el punte cae también la solidaridad popularidad 

A primera vista, Luis Castañeda ha tenido una rescatable performance en el terreno municipal. Con tres elecciones ganadas y una aprobación de más del 50% (a febrero del presente año) a pesar de escándalos como el peaje de Puente Piedra o el slogan que lo acompaña hace algún tiempo “Roba pero hace obra”, uno esperaría que el alcalde no tuviese dificultades en manejar Lima frente a los recientes desastres naturales. Pero no. El derrumbe del puente Solidaridad y las declaraciones relacionadas a este han tenido fuertes repercusiones en la popularidad del alcalde. Gfk ha recogido dichos eventos en su más reciente encuesta, publicada el pasado domingo, en la cual señala una caída de 13 puntos porcentuales en la aprobación de Castañeda respecto al mes anterior.

Sea cual fuere el caso, actualmente, Luis Castañeda pasa por el peor momento de su gestión como alcalde de Lima. Hizo falta un desastre natural para poner al descubierto parte de la ineficiencia de su labor y sus recientes ataques como respuesta a las declaraciones de PPK no han agradado a la población, siendo calificados de ofensivos.

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Ayuda desinteresada (?)

 

El Salvador de la aprobación

Por otro lado, el ministro con un mayor porcentaje de aceptación entre la población es Salvador del Solar. Recordando un poco el contexto de la elección de Salvador, esta se dio en medio de la abrupta renuncia del ministro del amor de Mariano Gonzales, criticado por la contratación de su novia como asesora de su despacho. Este hecho, como era de esperarse, se esparció más rápido que la pólvora en todos los medios peruanos y provocó una ola de reacciones y memes. #PeruanoQueNoEsFaranduleroNoEsPeruano

No obstante, al margen de las circunstancias, Salvador ha conseguido ganarse a buena parte de la población y callar a algunos detractores de su elección. Bajo mi punto de vista, la participación más resaltante en medios de prensa y también la más difundida, fue la respuesta al arzobispo de Arequipa cuando este le pidió que se prohibiera la ideología de género en el currículo escolar.

Tengo la impresión de que, como sociedad, les estamos poniendo la cruz a personas que consideramos que no entran en los moldes de nuestra manera de ver las cosas. (…) Vale la pena que reflexionemos y pensemos si tal vez no somos injustos, si juzgamos a personas tan peruanas como nosotros, seguramente tan católicas como nosotros, a las que hoy les ponemos esa cruz”.                                                               – Salvador del Solar.

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Nuestro ministro de cultura es mucho más que “un guapetón”

Se ha vuelto común que, tras ejercer ciertos puestos públicos por determinada cantidad de tiempo, una fracción de funcionarios se vea en la obligación de “retirarse de la política” porque “están quemados”. Debemos buscar que nuestros representantes sean siempre personas capaces, en el ámbito técnico, e intachables, en el aspecto moral, que permitan minimizar esta vergonzosa situación. Se dice que, actualmente, nos encontramos en un periodo de “resurgimiento”, que serán nuevas caras las que asuman cargos importantes, pues las antiguas….dejan mucho que desear. Esta nueva generación se pondrá al hombro al Perú y tendrá la responsabilidad de dejar en el pasado los famosos desplomes de aprobación por escándalos y las inaceptables “lavadas de cara”. Pero, también, depende de todos elegir a esas personas.