Desde el anuncio de los primeros contagios por la COVID-19 en el año 2020, el Gobierno peruano informó una serie de medidas y recomendaciones para evitar el contagio. Entre las principales, están el distanciamiento social y evitar la aglomeración de personas. Sin embargo, algunos han ignorado estas recomendaciones al asistir a las denominadas “fiestas COVID”. Estos problemas parten desde la decisión de las personas, las cuales se ven influenciadas por diferentes factores. En este caso, la economía del comportamiento nos puede ayudar a explicar lo mencionado a través de los sesgos e incentivos.

Fuente:dop3r.com

Para empezar, analicemos el comportamiento de los asistentes. Hay quienes asisten a las “fiestas COVID” sin ser conscientes de los riesgos que implica. Algunos de ellos creen, incluso, que el virus no los afectará o que es solo para “los de avanzada edad” #Diositomecuida. La economía del comportamiento estudia los sesgos de creencias y cómo influye en las decisiones de las personas. Dentro de los sesgos de creencias, se encuentra el sesgo de confirmación que es la orientación para dar mayor importancia a la información que encajan con nuestras creencias. Este, de hecho, podría ser la causa por la cual algunas personas deciden creer que el virus no les afectará.

Por otro lado, para quienes son conscientes del riesgo y aun así asisten, el análisis es más complejo, ya que sus incentivos son mayores que el costo de resultar contagiado. La teoría de juegos puede ayudar a explicar cómo interactúan para llegar a esa decisión. Para situar esto, supongamos un ejemplo: dos personas, que no se conocen entre sí, están indecisas en asistir a una fiesta organizada por amigos que tienen en común. Esto último es su mayor incentivo. Entonces, su máxima utilidad (2) la obtienen al llegar a reunirse. Sin embargo, si ven desconocidos en la fiesta, su nivel de utilidad disminuye a 1 porque temen a un posible contagio. Si no asisten, se sienten tristes por no ver a sus amigos y su utilidad es 0.


                                                                                                      Persona 2

                 AsistirNo asistir
Asistir               (1,1)      (2,0)
no asistir               (0,2)      (0,0)
Fuente: elaboración propia

Analicemos la decisión que tomará una de las personas. Si sale en cualquiera de los dos casos, es decir, la situación en donde solo encuentre a sus amigos o en la que, además de estos últimos, ve a desconocidos, obtiene una satisfacción o nivel de utilidad mayor (1 o 2) que el no salir (0). Lo mismo ocurriría con la otra persona, ya que tiene los mismos niveles de utilidad o satisfacción. El equilibrio de Nash resultará siendo que ambos decidan salir.

Sin embargo, esto no siempre resulta así. Hay personas que deciden rechazar alguna fiesta nocturna en estas épocas. El porqué de su decisión puede tener respuesta en el sesgo de aversión a la pérdida, que forma parte de los sesgos heurísticos, los cuales también son estudiados en la economía del comportamiento. Los sesgos de aversión a la pérdida es la tendencia a tener más en cuenta una pérdida que una ganancia de la misma magnitud. En este contexto, se podría suponer que las personas que deciden no asistir a una “fiesta COVID” sienten que perder su buen estado de salud podría ser más perjudicial que la satisfacción o la utilidad que ganarían asistiendo. Por otro lado, tienen diferentes incentivos a comparación de los que sí deciden asistir a estas fiestas. Esto se puede explicar con otras valoraciones del ejemplo anterior. Supongamos que esta vez el incentivo de las dos personas es que sus padres, que son de avanzada edad, no corran peligro de contagio. Cuando esto ocurre y se encuentran firmes de su decisión, su nivel de utilidad es 1; por el contrario, el asistir a la reunión les da una mayor inseguridad por el riesgo al contagio, por lo que su nivel de utilidad disminuye (0).

Persona 2

                 AsistirNo asistir
Asistir               (0,0)      (0,1)
no asistir               (1,0)      (1,1)
Fuente: elaboración propia

La estrategia dominante para ambas personas es no asistir ,por lo que el equilibrio de Nash resultará siendo no asistir para ambos.


En conclusión, la economía conductual puede explicar la decisión de algunas personas con respecto a asistir a las “fiestas COVID”. Esta decisión es causada por los sesgos e incentivos de cada una de las personas. Entre las que deciden ir, están las que no son conscientes del riesgo al contagio, ya que sostienen que el virus no les afectará. Esto último se explica por el sesgo de confirmación. Por otro lado, para las personas que deciden no asistir, está presente el sesgo de aversión a la pérdida. Por último, en ambos casos, la teoría de juegos, que forma parte de la economía de decisión o conductual, nos ayuda a entender cómo interactúan los individuos con base en sus incentivos para, finalmente, determinar su decisión.

Edición: Claudia Barraza