Al parecer, las marcas de agua en el Perú se han posicionado utilizando el mismo concepto, todas nos gritan a voces exactamente lo mismo, aun cuando utilicen adjetivos distintos para hacerlo. Por ejemplo: “Cielo, eleva tu vida”, “San Luis, una vida en balance se siente bien” y un sin parar de slogans hacen alusión al mismo atributo: “Bienestar”. Sin embargo, hay una marca que ha decidido contar una historia distinta que le ha permitido marcar la diferencia.

Mediante frases como “San Mateo, agua de manantial” o “tomó la forma de una montaña por miles de años” tienen el propósito de posicionar a San Mateo como una marca que no es hecha en una “fábrica” sino que proviene de la naturaleza. Así, San Mateo busca marcar la diferencia haciendo alusión al origen de su producto. Su estrategia se enfoca en apropiarse del concepto “natural” a través de la técnica del storytelling.

San Mateo: Sabor a manantial, certificado por la naturaleza, Fuente: Canal Oficial de Youtube de Agua San Mateo

El diferenciador de la marca radica en el proceso de fabricación del agua, en el que la naturaleza cumple el rol principal; y al mismo tiempo se convierte en el escenario ideal para la audiencia a la que la marca quiere llegar: los aventureros. San Mateo no nos muestra un estilo de vida saludable donde el bienestar impera, sino que les habla a aquellos que buscan la aventura al aire libre, vivir experiencias inolvidables en los paisajes más hermosos del Perú.

EL BRANDING DE SAN MATEO

San Mateo busca marcar la diferencia construyendo su posicionamiento bajo el concepto “natural” al poner de relieve su lugar de origen. Desde su nombre, la marca transmite la idea de que su agua es creada únicamente por la naturaleza; ya que el nevado de dónde proviene lleva también el nombre “Mateo”.

Además, al estar acompañado de la apócope “San”, su procedencia se vuelve mística y divina. Pasa de ser de una simple montaña a convertirse en un lugar mágico. De esa manera, la marca transmite misterio y sensualidad, cualidades importantes que debe tener toda lovemark para ser atractiva.

Agua San Mateo, Branding

Con respecto a sus colores, el color rojo resulta ser el más importante; ya que, refuerza aún más su misticismo. En la cultura andina, el rojo representa el contacto con la tierra y la vida.

El uso de la montaña como su principal símbolo visual sigue la misma línea de comunicar el concepto de marca. Asimismo, su uso ayuda a transmitir los atributos de abundancia y grandeza, cualidades con los que San Mateo busca asociarse.

En definitiva, cada recurso elegido fortalece la posición de la marca. Gracias a su buena gestión, San Mateo ha podido ofrecer una historia diferente que la hace tomar distancia de su competencia.

VENDE HISTORIAS, NO PRODUCTOS

En una categoría en donde el precio es un factor decisivo de compra por la falta de diferencia percibida entre las ofertas; es crucial contar historias que muevan emociones y que, sobre todo, el relato se distinga del común denominador. Gracias a aplicar este principio, San Mateo ha podido convertirse en una alternativa de compra.

Si hubiera tomado el camino fácil, habría decidido contar la misma historia; pero eligió el camino opuesto. Si la marca se enfoca en explotar aún más su asociación con la aventura y la naturaleza, podrá atraer a un gran grupo de personas aventureras que se identificarán con ella. Al final no venderá botellas con agua, sino aventuras.

Bibliografía

Ries, A., & Trout, J. (1986). La Guerra de la mercadotecnia. McGraw-Hill Companies.
Edición: Cristobal Contreras