El jueves 30 de enero la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró al brote de coronavirus originado en China como una “emergencia de salud pública de importancia internacional”. ¿Qué significa esto?, ¿qué tanto conocemos sobre este nuevo virus?, ¿deberíamos estar preocupados?  Iremos paso por paso.

Para comenzar, ¿qué es un virus? Un virus es un agente infeccioso formado por algún tipo de material genético rodeado de proteínas. Es mucho más pequeño que una célula y no es considerado un ser vivo, ya que no contiene estructuras celulares, por lo que depende de una célula huésped para replicarse. La palabra “coronavirus” hace referencia a un grupo de virus; lo que todos tienen en común es que su material genético es ARN y tienen puntas en forma de corona en su superficie. ​ Algunos solo afectan a los animales, pero otros también a humanos. De hecho, el resfriado común que tú y yo hemos tenido pudo haber sido causado por un coronavirus y la mayoría de personas han sido infectadas por lo menos una vez en su vida por ellos.

Estructura del coronavirus

Ahora, ¿qué está pasando en Wuhan, China? Ha aparecido un nuevo coronavirus que no es el que causa el resfriado común y se le ha denominado 2019-nCoV (2019 novel coronavirus). Este virus tenía como portador original a un animal, se cree que el murciélago o la serpiente, y ahora tiene la capacidad de infectar humanos. Para que esto haya sucedido, las personas tienen que haber estado en contacto directo con un animal infectado, de esa manera, el virus muta, adquiere la capacidad de entrar a una célula humana y nos infecta.

No es la primera vez que pasa esto. Una de las características de los coronavirus es que son zoonóticos, lo que significa que se pueden transmitir entre animales y personas. Algunos ejemplos son: SARS-CoV que se transmitió de las civetas (mamífero carnívoro) a humanos en Asia y MERS-CoV que se transmitió de los camellos a humanos en Medio Oriente. Asimismo, se conocen varios coronavirus que circulan en animales que aún no han infectado a los humanos. (1)

¿Cómo se propaga este virus? Una vez que adquirió la capacidad de infectar humanos, se comporta como un resfriado común. Es decir, basta un estornudo o tos de una persona infectada para contraerlo, ya que se encuentra en las gotículas de agua que son liberadas. Pero, ¿qué hace el coronavirus en el cuerpo? Una vez que es capaz de entrar, necesita replicarse, para ello entra en contacto con nuestras células, uniéndose a los receptores que se encuentran en la membrana. Los receptores son específicos, esta es la razón por la que no todos los virus infectan a los humanos.

Proceso de infección de un virus

Para entenderlo mejor, podemos pensar que la superficie externa del virus es como una llave y en las células se encuentra la cerradura. Solo si encuentra las células correctas, en la especie correcta, la cerradura se abre y, por ende, puede ingresar. Originalmente, el virus no era capaz de infectar humanos porque tenía la llave incorrecta, sin embargo, mutó de tal manera que ahora su superficie sí puede reconocer a las células humanas. Al entrar, tiene acceso a toda la maquinaria celular y la usa para producir proteínas que forman nuevos virus a partir de su material genético. Es decir, convierte a nuestras células en fábricas sintetizadoras de virus, de esa manera, llenan la célula con millones de virus y esta estalla. Este ciclo se repite de nuevo y, así, todas las células comienzan a morir.

Posteriormente, tu cuerpo siente esto y comienza a desencadenar una respuesta inmune, lo que creará los conocidos síntomas de un resfriado común que incluyen: dolores de cabeza, tos, dolor de garganta y fiebre. Como el virus continúa proliferando y las células continúan muriendo, en la desesperación, los glóbulos blancos pueden activar una variedad de productos químicos que pueden causar la fuga de líquido en los pulmones, generando asfixia,  así como neumonía. Sin embargo, el virus directamente no siempre es causa de muerte. Debido a que, el sistema inmune está debilitado, otros organismos como bacterias pueden aprovechar para hacer de las suyas.

Tomando en cuenta todo lo que ahora sabemos sobre el coronavirus, ¿deberíamos preocuparnos? De los 14.000 casos confirmados en el país asiático, solo 300 personas han muerto, lo que representa alrededor del 2%. Se ha declarado una emergencia internacional, ya que con tantos viajes es muy fácil propagar un virus de un país a otro, habiendo alrededor de 100 casos en 24 países, pero ninguna muerte fuera de China. Actualmente no existe un tratamiento directo ni vacuna, sin embargo, para no preocuparnos y estar preparados, es mejor prevenir la infección evitando exponerse al virus. Para ello, la OMS recomienda: lavarse las manos con frecuencia, evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca con las manos sin lavar, evitar el contacto cercano con personas que están enfermas y desinfectar objetos y superficies que se tocan con frecuencia. (2)

  1. Organización Mundial de la Salud (2020). Coronavirus Obtenido de: https://www.who.int/es/health-topics/coronavirus/coronavirus
  2. Center for Disease Control and Prevention (2020). Prevention & Treatment 2019 Novel Coronavirus. Obtenido de: https://www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/about/prevention-treatment.html