Cuando escuchas la palabra pandemia, ¿qué es lo primero que se te viene a la mente? Seguramente tu primer pensamiento incluye las palabras COVID-19, aislamiento social y mascarillas. Y aunque el COVID-19 terminó en una pandemia que ha logrado afectar a muchas personas, también muchas veces nos olvidamos que antes de que llegara el virus a sacudir nuestras vidas, vivíamos en otra pandemia: la diabetes. Esta enfermedad afecta a 382 millones de personas y se estima que va a ser la séptima causa principal de muerte para el 2030 debido a su rápido aumento. 

Anteriormente, se ha demostrado en varios estudios que la diabetes es un factor clave para poder desarrollar un caso severo de COVID-19 y personas con esta condición tienen una mayor probabilidad de fallecer. Sin embargo, estudios recientes sugieren que no solo tener diabetes te hace más vulnerable a la enfermedad, sino que también ocurre en el sentido opuesto: el mismo virus puede desencadenar un cuadro de diabetes en algunos pacientes.1 No le bastó al virus Sars-Cov-2 causar serios problemas respiratorios en sus víctimas, sino que las personas que llegan a vencer al virus podrían salir con nuevas enfermedades que no se imaginaban, como la diabetes.

¿Cómo sería esto posible? Primero hay que saber a qué conocemos como diabetes. Esta es una enfermedad en la cual no se produce suficiente insulina o cuando el organismo es incapaz de utilizarla eficazmente. Esto lleva a una persona a presentar hiperglucemia, es decir una alta concentración de glucosa (azúcar) en sangre. Tener elevadas concentraciones de glucosa puede desarrollar diversos mecanismos de inflamación y dañar varios órganos en nuestro cuerpo. Es por ello que una persona diabética es más vulnerable ante el virus, y el científico Paul Zimmet se lo describió así a la revista Nature: “La diabetes es dinamita si contraes COVID-19”.1

Clasificación según concentración de glucosa en sangre

Entonces, ya conocemos lo peligrosa que es esta condición frente al virus, ahora ¿cómo sería posible que el mismo virus logre desencadenarla? Anteriormente se ha encontrado evidencia que varios virus que causan síndrome respiratorio agudo severo (familia SARS por sus siglas en inglés) se encuentran relacionados con enfermedades autoinmunes como lo es la diabetes tipo 1.2

Esta enfermedad puede desarrollarse en los pacientes infectados por COVID-19 debido a que este puede dañar las células involucradas en la regulación de azúcar en sangre como los son las células ɑ y β del páncreas. El daño puede ser causado directamente por el mismo virus o se puede dar de manera autoinmune; es decir que el mismo sistema inmunológico, en su lucha por defenderse del virus, ataca células sanas como las mencionadas antes. Esto es de mucha importancia ya que las células β del páncreas son las encargadas de producir insulina, la hormona que regula los niveles de azúcar en la sangre impidiendo que estos se encuentren elevados. Si estas son destruidas, la glucosa en la sangre no será regulada, generando una hiperglucemia.1,3

Types 1 of Diabetes Mellitus.
Metabolismo con diabetes tipo 1

Aquello se ha podido observar en personas que fueron hospitalizadas con COVID-19, quienes, a pesar de haber mostrado anteriormente signos de patología diabética, han desarrollado diabetes tipo 1 por lo anteriormente descrito. Asimismo, personas diagnosticadas anteriormente con pre-diabetes o una existente diabetes tipo 2 pueden empeorar su estado de salud. Sin embargo, debido a que el virus es relativamente nuevo, aún queda por realizar estudios en cohortes más grandes y a largo plazo. 

Esto es un llamado de atención para todos. La pandemia continúa sacudiendo nuestras vidas y cada día aparece nueva evidencia que confirma sus efectos fatales en todos los contagiados. Es por ello que, a pesar de que la cuarentena en nuestro país ha culminado, debemos continuar respetando las medidas de seguridad establecidas porque como hemos visto, el precio que pagas al contagiarte es alto. Asimismo, no olvidemos la importancia de llevar un estilo de vida saludable a fin de evitar encontrarnos en una situación de mayor vulnerabilidad frente al virus recordando que tener el azúcar elevado en la sangre no tiene un final dulce. 

Editado por: Daniela Cáceres

Referencias:

  1.  Mallapaty S. (2020). Mounting clues suggest the coronavirus might trigger diabetes. Nature. Disponible en:  https://www.nature.com/articles/d41586-020-01891-8
  2. Hamming I, Timmens W. (2004). Tissue distribution of ACE2 protein, the functional receptoDisponible en: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/15141377/
  3. Chee Y, Ng S, Yeoh E. (2020). Diabetic ketoacidosis precipitated by COVID-19 in a patient with newly diagnosed diabetes mellitus. Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7194589/