Toda civilización ha tenido la creencia de que los humanos no vamos a estar para siempre: los mayas decían que una serie de desastres naturales nos extinguirán, los cristianos creen que la batalla entre Dios y el demonio acabará con nosotros y todo el mundo capitalista juraba que el Y2K iba a arrojarnos al caos y terminaría con el mundo occidental.

Sin embargo, henos aquí. Hemos sobrevivido a más de 10 fines del mundo en los últimos 20 años y la gente sigue creyendo en ellos. Es por ello que he decidido recopilar una lista de los posibles escenarios en los cuales la vida humana podría llegar a su fin, separado por categorías totalmente arbitrarias.

Siempre hay que estar preparado ante la llegada del fin del mundo.

Siempre hay que estar preparado ante la llegada del fin del mundo.

EXTINCIÓN NATURAL

Es conocimiento de todos que la naturaleza puede ser una perra fría hostil e implacable con aquellos que no se logran adaptar. #GraciasDarwin Siguiendo esta lógica, se pueden encontrar varias situaciones en las cuales todos los humanos pereceríamos, sin que se acabe toda vida terrestre, necesariamente.

Un escenario que muchos creyeron se estaba dando a cabo durante la crisis de la gripe porcina, es el de una pandemia. En este caso una enfermedad infecta a una gran parte de la población mundial, causando la muerte en cada esquina y acechando a cada persona, pues todos saben que en cualquier momento llegará su turno. Hermoso, ¿no?

Creo que todos sabemos que esto fue lo que en realidad.

Creo que todos sabemos que esto fue lo que pasó en realidad.

Por otro lado, puede que los desastres naturales sean nuestra perdición. Quizás sea la erupción del supervolcán en Yellowstone, un terremoto masivo o hasta un tornado que arrastra tiburones que habían sido arrastrados por un huracán. Hay gente loca muy precavida que se prepara para cada una de estas situaciones –sí, incluyendo sharknado–  llamados preppers.

Por último, puede que nuestra extinción esté siendo planeada en este momento por una especie superior que no conozcamos y que viva en la Tierra (o en su corteza). Aunque suene raro, existen varios teóricos de la conspiración que creen que los puestos más importantes están gobernados por los reptilianos, una especie de ser antropomorfo, que tiene piel con escamas y que puede cambiar de forma.

Ahora, si bien es muy probable que eventualmente la Tierra ocasione algo suficiente como para causar nuestra extinción, no hay nadie mejor para el trabajo que nosotros mismos.

EXTINCIÓN ANTROPOGÉNICA

Los humanos tenemos esta envidiable capacidad de destruir prácticamente cualquier cosa que esté en nuestro entorno, incluyendo al entorno mismo. Es por ello que considero que nuestra condena está en nuestras propias manos. Pero, todavía falta determinar cómo cometeremos el primer suicidio de especie.

El escenario más probable, a mi parecer, es que nuestros intentos por detener el cambio climático hayan llegado demasiado tarde, por lo que solo están postergando por un poco nuestro inevitable final a manos de un planeta extremadamente diferente y de escasos recursos, gracias al esfuerzo colectivo de varias generaciones por liberar gases que hacen a este planeta inhabitable y por disminuir la cantidad de organismos capaces de revertirlo. #Teamwork

Hasta ahora no hay teoría más convincente que la demostrada en esta imagen.

Hasta ahora no hay teoría más convincente que la demostrada en esta imagen.

Otra situación que podría causar el fin de la vida humana es uno que mi tía jura que va a pasar en cualquier momento; es decir, una tercera guerra mundial. Ya que los humanos somos tan buenos destruyendo, hemos ideado herramientas hechas con solo ese propósito: las armas nucleares y biológicas. Estas muy versátiles herramientas pueden acabar con todo organismo en un radio de varios kilómetros, dejando inhabitable un área mucho mayor a la inicial. Además, en la actualidad ya contamos con suficientes de estas armas como para destruir toda la vida en la superficie terrestre (no a toda la Tierra, como comúnmente se dice), así que un conflicto nuclear podría fácilmente acabar con los humanos.

En contraparte, puede que las herramientas que usamos para desarrollarnos como especie sean las que terminen por destruirnos. O sea, nuestra tecnología podría estallar -figurativa o literalmente- en nuestras caras. Tal vez la inteligencia artificial que nos iba a cuidar decidió que nosotros somos el problema, o los nanobots que iban a ayudarnos a construir un mejor futuro se descontrolaron y destruyeron todo a su paso, o el experimento que nos iba a ayudar a comprender el inicio de la existencia acabó con la nuestra, etc. Existe un gran número escenarios en los que podríamos extinguirnos debido a la ciencia en la literatura, así que ahí lo dejaré.

Finalmente, puede que las tendencias de crecimiento poblacional sean nuestra perdición. Las Naciones Unidas estiman que para 2100 seremos más de 10 mil millones de humanos en el mundo y, si algo sabes de relaciones directamente proporcionales, notarás que eso significa que vamos a necesitar mucha más comida, agua y espacio, lo cual ahora ya es problema. Así que ya se imaginarán cómo sería entonces.

Sin embargo, todos los escenarios planteados hasta ahora son muy poco atractivos en comparación con lo que el frío cosmos nos tiene preparado.

EXTINCIÓN CÓSMICA

Como muchos sabrán, todavía no hemos encontrado vida alienígena. Pero, con lo enorme que es el universo, los científicos se preguntan por qué parece que estamos solos en este pequeño punto azul. Lo más probable es que toda vida extraterrestre se haya enfrentado a uno de las muchas amenazas que el universo presenta.

La más conocida de dichas amenazas son los asteroides. Ya saben, esos que son patas del que causó la extinción de las criaturas más atemorizantes que han existido en la Tierra y que tuvieron un dominio más de 800 veces más largo que el de los humanos. Así que no creo que sea necesario elaborar por qué un asteroide podría causar la extinción de los humanos.

También puede que los mejores amigos de History Channel sean quienes traigan la destrucción y caos a este planeta. Puede que nuestros intentos por hacer contacto con vida extraterrestre den frutos, solo que esos frutos no serían muy dulces que digamos. Es muy probable que, de existir una raza alienígena inteligente, ésta sea colonizadora -tan solo hay que ver en nuestra historia para ver lo común que es eso- y vea nuestros mensajes como potenciales amenazas a su dominio y, por ende, seamos exterminados.

Otra hermosa forma de acabar con toda vida humana es a base de brotes de rayos gamma. Estos espectaculares eventos ocurren todo el tiempo en el universo y son, en pocas palabras, explosiones masivas de estrellas que colapsan en agujeros negros y emiten un haz de luz altamente energizada al vacío del universo. Sin embargo, puede que uno de esos brotes ocurra relativamente cerca de la Tierra y que, por cosas de la vida, decida apuntar hacia nosotros. De ser así, la energía del evento podría arrancar la capa de ozono y transmitirnos tanta radiación que todos moriríamos en poco tiempo, o, si tenemos algo de suerte, la radiación causaría suficiente daño en nuestro ADN como para causar mutaciones que hagan imposible la reproducción de la especie y todos muramos lentamente (pero felices) como horribles mutantes.

Como muestra la imagen, la radiación a la que un brote de rayos gamma nos expondría nos causaría graves mutaciones.

Como muestra la imagen, la radiación a la que un brote de rayos gamma nos expondría nos causaría graves mutaciones.

Pero no tiene que ser una estrella desconocida la que tenga el placer de aniquilarnos, pues tenemos una a la que vemos todos los días en el vecindario que podría, fácilmente, cumplir la tarea. Estoy hablando, obviamente, del Sol. Este astro que es el pilar de la vida y que ha sido venerado como dios por innumerables civilizaciones algún día se va a morir y el desgraciado se va a asegurar de que él no sea el único en irse. Esto es porque, cuando una estrella como el Sol está por terminar su ciclo de vida, se expande y aumenta su temperatura, por lo que nuestros océanos se secarían y nuestros bosques se incendiarían mucho antes de que nuestra estrella muera. La única salida de este certero destino es colonizar planetas fuera del sistema solar, lejos del alcance del Sol.

Para terminar, aun logrando escapar de toda forma de extinción que se pueda, cuando seamos amos y maestros del universo, cuando nosotros seamos los aliens de los que otras formas de vida se tengan que cuidar, cuando la enfermedad y el hambre sean cosas olvidadas, cuando los asteroides que nos hubieran aniquilado sean nuestras montañas rusas y las agonizantes estrellas sean grandes atracciones turísticas, nos daremos cuenta de que el final es inevitable. Tal vez lleguemos a tener total dominio del universo, pero los principios de la termodinámica nos dicen que todo va a terminar en oscuridad y frío, pues las últimas estrellas morirán y así toda vida tendrá que acabar.

Suelo acabar mis artículos con mensajes inspiradores o reconfortantes, pero no sé cómo hacerlo cuando hablo acerca de la inminente muerte de todo y todos en el universo.

Suelo acabar mis artículos con mensajes inspiradores o reconfortantes, pero no sé cómo hacerlo cuando hablo acerca de la inminente muerte de todo y todos en el universo.