A tan pocas semanas de la Cumbre de las Américas, la crisis política en el Perú se agudiza aún más con el reciente pedido de vacancia presidencial –el segundo en los últimos tres meses. Esta vez, ha sido presentado por 30 congresistas de diferentes bancadas (principalmente de izquierda), quienes buscan sacar del poder a PPK nuevamente por “permanente incapacidad moral”, que al parecer se ha vuelto la vieja confiable para vacar presidentes. La moción de vacancia ya ha sido aceptada por el Pleno del Congreso y en los próximos días se realizará la nueva presentación de PPK ante el Parlamento (¿alguien dijo Condorito?).

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Por un lado, el presidente ha demostrado carecer de cualidades para gobernar y ha cometido errores graves en sus menos de 2 años en el poder que, nuevamente, lo ponen en este escenario tan delicado. Por el otro, no se puede negar que los fantasmas de las elecciones de 2016 aún están presentes y siguen haciendo y deshaciendo a vista y paciencia de todos de acuerdo a sus intereses. Un escenario como este, además de generar inestabilidad interna, muestra el lado más vulnerable del gobierno peruano ante los líderes de los 34 países que arribarán a nuestro país a mediados de abril.

Pero, ¿qué verdaderos intereses hay detrás del nuevo pedido de vacancia? En sus más recientes declaraciones, Verónica Mendoza señaló que su bancada (Nuevo Perú) consideraba que el presidente era incapaz de gobernar: al ser investigado por la Comisión Lava Jato, su prioridad se centraba en eludir dichas investigaciones más que en servir a los peruanos, por lo que debería dejar el cargo. Asimismo, otros congresistas de bancadas como Frente Amplio y Fuerza Popular han señalado a PPK como “incapaz moral” por su deslealtad con el pueblo y por sus vínculos con la corrupción. A todo esto se añade el reciente informe que se le alcanzó a la Comisión Lava Jato donde se detallaban, entre otras cosas, grandes montos en transferencias por consorcios manejados por Odebrecht.

Quizás, después de todo, PPK le ceda este “peso” a Martín Vizcarra. Ilustración: Andrés Edery

Entonces, cada quien tiene un interés diferente en la vacancia, lo admitan o no, y tal parece que no están muy alineados en qué consiste la incapacidad moral. ¿Pero realmente somos conscientes del mal que este escenario le genera al país, sobre todo cuando próximamente el Perú será sede de un evento que lo posiciona ante los ojos del mundo? PPK sostiene que muchos mandatarios dejarían de asistir a la Cumbre de las Américas si se da el escenario de la vacancia. ¿Cómo afectaría esto los objetivos de la cita?

La gobernabilidad interna de un estado y su calidad como anfitrión de una reunión internacional, para algunos, deben ser temas tratados por separado, lo cual no es del todo descabellado. No obstante, el tema central de esta cumbre (propuesto por el Perú, dicho sea de paso) es el tratamiento de los efectos de la corrupción en las instituciones democráticas, la gobernabilidad y el desarrollo sostenible. Una vacancia sin razones que la justifiquen adecuadamente es un ejemplo de aquello que los objetivos de esta cumbre buscan solucionar y deja mal parado al gobierno peruano. Respecto a la asistencia de los mandatarios de distintos países, es posible que algunos se cuestionen el orden democrático y opten por no asistir. Esto también podría tener un efecto negativo para la reunión, sobre todo si es que los mandatarios ausentes tienen experiencias y opiniones que pueden aportar al desarrollo de soluciones.

Finalmente, PPK sabe que en este segundo pedido de vacancia ya no tiene más presidentes por indultar a cambio de votos (?). Por esta razón, además de contar con los votos de su bancada y con los famosos “Avengers”, deberá volver a dialogar con distintos congresistas del fujimorismo y de la izquierda. Según Meche Aráoz, ya tendrían nuevos refuerzos secretos que votarán en contra de la vacancia. Recientemente, se divulgó un audio en el que Kenji Fujimori negociaba votos para evitar la vacancia de PPK. En este, se mencionaba el intercambio de presupuestos para obras y la cercanía de Kenji con el ejecutivo. La respuesta de la ciudadanía ha sido inmediata y, una vez más, el presidente reduce el respaldo del pueblo que lo eligió, lo que también podría afectar la popularidad de quienes finalmente decidan apoyarlo, causando que algunos de los que en un inicio iban a votar en contra de la vacancia se arrepientan. Así, el escenario se muestra aún más incierto y poco favorable para PPK. Por lo pronto, esperemos que, después del jueves, podamos comenzar de nuevo lejos de la incertidumbre política, ya sea de la mano de PPK o de Martín Vizcarra…